Es una patología de baja incidencia, pero mal atendida en estos momentos en Tabora. Estos niños tienen con frecuencia problemas para alimentarse correctamente, para desarrollar el habla, para desarrollar la dentición, problemas de infecciones en los oídos, etc, y esto los hace más vulnerables que los niños normales, lo cual los conduce a una tasa de mortalidad extremadamente elevada en estos países. Los niños y adultos que hemos operado no habían tenido nunca la posibilidad de recibir un programa de tratamiento adecuado, a pesar de que actualmente en la mayoría de los casos existe un tratamiento sencillo y eficaz.